domingo, 10 de marzo de 2013

¡Matemos la Arial!

 A estas alturas que en el mundo editorial estamos entre expectantes e inquietos, unos más que otros, viviendo como la industria se recicla al mundo digital mostrando nuevos avances, tanto en el modelo de negocio como en la edición del libro, me sorprende que todavía tengamos que soportar las cutreediciones que se llevan a cabo en las páginas web, blogs, etc. 

No es cuestión de culpar al material para editar que nos proporciona, pongamos por caso, los blogs: dentro de las limitaciones de la plataforma hay herramientas que, al menos, pueden dar una mínima lecturabilidad y decoro a los post. ¿Como puede ser que en la inmensa mayoría de blogs y webs de edición, en las que se debaten pormenorizadamente el papel del editor en el mundo digital con todas sus vicisitudes en una coyuntura en la cual el escepticismo y la autoedición cuestionan su papel en un futuro más o menos inmediato, todos sus escritos sean tan ilegibles? ¿Como puede un editor editarse en Arial? Es como si el guarro diera clases de higiene...



La tipografía Arial, más allá de gustos personales, no es mala. Pero, como todas, su utilidad depende del uso que se le dé. Los tipos de la Arial son largos y estrechos, con astas muy cortas, lo que lo hace llamativo en textos muy cortos. Pero esta esbeltez y monotonía la hacen una tipografía poco legible en párrafos más o menos largos. Se puede comprobar en la lectura de textos largos: tras leerlo acabas reventado. Y la culpa no la tiene la extensión del texto porque, en realidad, los capítulos de cualquier novela mediocremente editada son más largos y puedes incluso leerte la novela de una tacada. La poca lecturabilidad de los post en Arial necesitan de una mayor concentración en la lectura. Y esto por desgracia, ocurre porque no se edita lo que se escribe. Por desgracia las herramientas, al menos en los blogs, son insuficientes y no permiten elegir, por ejemplo, el interlineado, lo que hace que la elección de los tipos tenga todavía mayor peso a la hora de elaborar nuestros textos.

Estamos reciclándonos y vendiendo al mundo que somos y seremos útiles en la era digital. Si es eso verdad, hay que empezar a tomarse en serio todo lo que publicamos, no sólo los libros.

martes, 19 de febrero de 2013

Nueva fórmula: ¿Pagar por lo que has leído?



Total Boox está creando una plataforma por la cual ofrecerán libros por los que el lectór pagará por lo que lee. Es decir: si lees el 10%, pagarás sólo el 10% del libro. Esta novedosa estrategia tiene dos premisas: la primera competir contra la política de bajos precios de Amazon y de la autoedición; la otra es "obligar" a las editoriales a ofrecer mejor calidad. ¿Es esto una excusa para mantener el precio del ebook alto?

jueves, 7 de febrero de 2013

¿...Y que será del editor?

Leí hace poco en Ecos de Sumer, un buen blog sobre el mundo editorial que encontrarán en mi lista de blogs, a la derecha, acerca del cambio de liderazgo en la edición de hoy en día. Concretamente se habla de la asunción de la gestión y distribución de contenidos editoriales, tanto digitales como físicos, por parte de grandes plataformas de distribución y comunicación en internet tales como Google, Amazon, Apple, etc, sin contar con la posibilidad de que se suban al carro editorial los gigantes de la telefonía (Vodafone, Orange...). Esta cuestión me ha planteado ir más allá y pensar acerca de la figura, singular, del editor y cual va a ser su lugar en el mundo de aquí en adelante: ¿Que cambios conllevará para el editor el cambio de paradigma? ¿Dónde se situará el editor? ¿Y si el mundo digital trae la emancipación del autor respecto del editor? ¿Y si cambia el "status quo" y es el autor quien elige y contrata al editor que más le interese? ¿Y si pasamos a tener un rol semejante al de un abogado, que ofrece sus servicios a su cliente y éste decide si es el editor adecuado para su obra o no? Ahí estoy imaginandome a mí mismo esperando en un sofá, junto a otros tantos editores, esperando turno, currículo en mano, para la entrevista con el autor de turno.

miércoles, 16 de enero de 2013

El cómic español en 2012: ¿Aguantará la crisis?



Se acabó 2012 y con el nuevo año algunos editores y bloggers hacen balance del año. Hoy voy a referirme al estudio estadístico sobre el cómic español en el mercado del año que nos ha dejado que ha realizado Gerardo Vilches, blogger de Watcher and the Tower y colaborador asiduo de entrecomics.com. El estudio, que no pretende ser exhaustivo, ha sido revisado y corregido por el editor José A. Serrano. Pueden verlo aquí:  http://thewatcherblog.wordpress.com/2013/01/04/el-comic-espanol-en-2012/



Metidos en materia, el estudio muestra como en 2012, y a pesar de la crisis, el mercado del cómic español parece mantenerse. Aún a falta de un estudio comparativo respecto a años anteriores, el hecho de que la editorial EDT ocupe el solito el 20% de todas las novedades ya da a entender que la apuesta no ha sido un brindis al Sol. Recordar que EDT es una editorial de nuevo cuño surgida de las cenizas de Glénat en España, desaparecida por desavenencias con la sede madre en Grenoble, y además perdieron algunas de las licencias que más beneficios daba a la editorial. A pesar de las dificultades, EDT apostó por el cómic de origen nacional en dos vertientes: Una en la reedición de clásicos, que ya estaba en marcha cuando aún eran filial de Glénat, aprovechando la moda vintage tan en boga estos últimos años; otra es la apuesta por obras de nuevo cuño realizadas por autores españoles, muchos de ellos noveles.